En octubre también habrá consulta popular ambiental

Los colombianos tienen una cita trascendental con las urnas el 2 de octubre de 2016, pues mediante plebiscito decidirán si están de acuerdo o no con los Acuerdos de Paz firmados entre el Gobierno y la guerrilla de las FARC. Unos días después, pero específicamente en la ciudad de Ibagué (Tolima), los ciudadanos responderán una consulta popular sobre la minería contaminante en la región. El alcalde de la ciudad, Guillermo Alfonso Jaramillo, ha solicitado a la Registraduría que se apruebe el 30 de octubre como fecha para la Consulta Popular.

Los ibaguereños deberán responder a la siguiente pregunta:

¿Está usted de acuerdo si o no que en el Municipio de Ibagué se ejecuten proyectos y actividades mineras que impliquen contaminación del suelo, pérdida o contaminación de las aguas o afectación de la vocación agropecuaria y turística del municipio?

Esta consulta popular, primera que se convoca en una capital del país, es una conquista de diversos comités promotores de una explotación controlada de los recursos naturales en la región. Según datos de la Agencia Nacional Minera, en Ibagué hay 99 títulos mineros en concesión, que corresponden a 42.000 hectáreas del municipio (el 30% del total de Ibagué). Actualmente, hay 44 solicitudes mineras más, que de ser otorgadas, completarían el 53% del área total del municipio de Ibagué.

Según los estudios técnicos presentados, las titulaciones mineras están afectando las fuentes hídricas del municipio, especialmente en el río Combeima. Las organizaciones ambientalistas advierten que las bocatomas de los acueductos que abastecen Ibagué están en zonas ya tituladas o en proceso de convertirse en título minero para la explotación de oro. En la zona de páramos y en las inmediaciones del volcán Machín también hay titulaciones mineras de las cuales se cuestiona el rigor ambiental con el que realizan sus actividades.

Los promotores del NO en la consulta popular aclaran que los pequeños mineros no se verán afectados, porque la preocupación del Comité Ambiental En Defensa de la Vida y de la Alcaldía de Ibagué se centra en la "minería extensiva e intensiva de materiales metálicos que son para los que están dadas las mayores hectáreas de tierra en extensión. Ya que de los 99 títulos mineros, 92 tienen que ver la actividad minera de metales pesados (oro, cobre, zinc, plata, platino, manganeso, entre otros). Solo el 8% está destinado para explotación minería de material de arrastre (arena, material de recebo, material de uso y construcción, entre otros)" indicó Jorge Mario Vera, experto en Planificación y Manejo Ambiental de Cuencas Hidrográficas.

Consulta Popular

Tal como sucede con la Acción Popular y la Acción de Grupo, la Consulta Popular es un mecanismo de participación ciudadana, previsto en la Constitución y amparado por la Ley 136 de 1994:

Artículo 33º.- Usos del suelo. Cuando el desarrollo de proyectos de naturaleza turística, minera o de otro tipo, amenace con crear un cambio significativo en el uso del suelo, que dé lugar a una transformación en las actividades tradicionales de un municipio, se deberá realizar una consulta popular de conformidad con la Ley. La responsabilidad de estas consultas estará a cargo del respectivo municipio.

Como los usos del suelo deben ser aprobados por el Concejo Municipal, la decisión que se adopte en la Consulta Popular de Ibagué será vinculante y determinante para cualquier decisión que tome el municipio respecto a su medio ambiente.

Para ser válida, esta Consulta Popular requiere superar el umbral de los 130 mil votos. Según explican sus promotores han encontrado muchos obstáculos para su difusión, especialmente de las grandes empresas mineras y de algunos estamentos gubernamentales. Sin embargo, están empeñados en conseguir los votos necesarios y están haciendo campaña en todos los barrios, puerta a puerta, para explicar el alcance de la Consulta Popular y sus implicaciones.