Sancionan Ley del Vigilante, que mejora condiciones laborales en el sector
Con esta nueva ley las personas que se dedican a la seguridad privada tendrán más garantías para realizar su labor y un nuevo marco normativo.
La nueva Ley del Vigilante, ley 1920 del 12 de julio de 2018, fue sancionada por la Presidencia de la República y garantiza mejores condiciones laborales a las personas dedicadas a la seguridad privada en Colombia. Esta ley contiene, entre otras, disposiciones sobre seguro de vida, jornadas de trabajo, remuneración, profesionalización y vinculación de mujeres, personas mayores o en condición de discapacidad.
Entre sus principales acciones, la Ley del Vigilante crea un marco jurídico para la inspección, control y vigilancia sobre las cooperativas de vigilancia y seguridad privada en el país.
Además, establece un marco regulatorio para el adecuado desempeño de la labor del personal operativo de vigilancia y define incentivos para la profesionalización de esta actividad a través del Sena, en convenio con empresas y cooperativas de vigilancia y seguridad privada (Resuelva sus dudas frente al tema acudiendo a consulta con nuestro listado de abogados).
La ley 1920 del 12 de julio de 2018 establece además cuáles son los requisitos para que sea otorgada la licencia de funcionamiento de las cooperativas especializadas de vigilancia y seguridad privada, indicando que dichas cooperativas "deberán adjuntar a su solicitud de licencia de funcionamiento copia del régimen de trabajo, previsión, seguridad social y compensaciones debidamente aprobado por el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social".
Dichas cooperativas, una vez avaladas, deberán contratar anualmente un seguro de vida colectivo que cobije a todo el personal operativo de la empresa durante las 24 horas del día. El mismo requisito aplicará a los departamentos de seguridad de compañías.
Esta Ley del Vigilante además buscará que las empresas deberán aumentar, dentro de su personal operativo, en contratos celebrados con entidades no estatales, el número de mujeres, personas con discapacidad y/o personas mayores de 45 años, contratadas con todas las exigencias y garantías legalmente establecidas.
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La ley también se refiere a lo concerniente a la adquisición de los certificado de aptitud psicofísica para el porte y tenencia de armas de fuego. Este podrá realizarse en cualquier IPS del país y los vigilante podrá obtener copia de este. Los resultados logrados en dicha prueba ya no serán causales de exclusión, por el contrario, se deja claro en la ley que en caso de ser necesario, el trabajador debe ser reubicado en funciones operativas que no requieran el uso de armas, entre otros beneficios
Cambio en jornada laboral y remuneraciones
Otra de las modificaciones propuestas por la ley y que se empezarán a aplicar en Colombia se refiere a la jornadas suplementaria aplicable al sector vigilancia y seguridad privada. De esta forma se establece que los trabajadores del sector podrán, previo acuerdo con el empleador, laborar máximo en jornadas laborales diarias de 12 horas, sin que esto implique que se exceda la jornada máxima semanal de 60 horas, incluyendo las horas suplementarias, autorizadas en la legislación laboral nacional vigente.
"Para esto se mantendrá el tope de la jornada ordinaria en ocho horas y se podrá extender la jornada suplementaria hasta por 4 horas adicionales diarias", agrega el cuerpo de la Ley del Vigilante e indica que "en todo caso se deberá respetar el descanso establecido en la normativa laboral vigente".
Esta jornada será reconocida y remunerada como tal por parte de los empleadores. A los trabajadores de vigilancia y seguridad privada se les deberá reconocer, y pagar a partir de las ocho horas diarias de la jornada laboral ordinaria, la jornada de trabajo complementaria, domingos y festivos y descansos compensatorios.
"Tratándose de asociados a cooperativas de trabajo asociado, las relaciones de trabajo se rigen por los correspondientes regímenes de trabajo asociado o de compensaciones, según el caso", puntualiza la norma.
Por último, esta ley estableció el 26 de noviembre como el Día del Vigilante, o Día Nacional de la Vigilancia y la Seguridad Privada, para reconocer su aporte a la sociedad colombiana.
